Las celebraciones son con autenticas costumbres de cada pueblo
Revisando el calendario festivo
de nuestro país se puede apreciar que la
imagen de la Virgen del Rosario es recordada con mucha veneración.
Su
culto se remonta a 1536 y se celebra en todo el Perú, en la provincia limeña de
Cajatambo, recuerdan a su santa desde el primer domingo de octubre, con la
realización de una feria agropecuaria, concursos de marinera y una procesión
que tiene como principal comparsa la de Los diablos.
Por
su parte en los distritos de Urcos, provincia cusqueña de Quispicanchis, así
como en Combapata y Checacupe de la provincia de Canchis, organizan el evento
con procesiones, ferias taurinas y
pachamancas.
Sin
embargo el centro más importante de las celebraciones de la Virgen del Rosario,
siempre ha sido el departamento de Ancash, donde los festejos se realizan con
la presencia de las pallas, doncellas vestidas con trajes de mangas anchas y
coronas altas de flores en la cabeza, y los famosos negritos, danzantes que
llevan una máscara de lana negra y que animan la conmemoración.
En
esta fiesta se representa un enfrentamiento simbólico entre moros, pobladores
vestidos con trajes andinos, y cristianos, vestidos con trajes españoles de la
Colonia. La lucha termina cuando los reyes moros, se arrepienten y piden su
conversión al cristianismo. Al atardecer se inicia la procesión de la Virgen
acompañada de bandas de músicos de regreso a su templo.
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